Todas queremos que nuestros hijos sean felices, no sufran, queremos ayudarles y que se sientan queridos y protegidos, ello colabora en su desarrollo y contribuye a mejorar su autoestima. Pero, un consejo, ten cuidado porque un niño sobreprotegido suele esperar a que su madre le solucione siempre sus problemas porque se siente inseguro. Encuentra dónde está el límite y serás la mamá ideal.

Eres una mujer dinámica, trabajadora, acostumbrada a resolver tus problemas por ti misma y te gusta el control. Son unas cualidades perfectas para criar a un niño porque les transmite seguridad y es bueno estimularles para que no se duerman en los laureles, pero ojo con la hiperexigencia porque, en algunos casos, les puede llegar a desmotivar.

Eres creativa, espontánea y tienes mucha imaginación, son cualidades que a los niños les encantan y les divierten. También te gustan los cambios y empatizas con los demás, todo ello tiene muchas ventajas pero no olvides que la rutina y establecer ciertas normas da a los más pequeños seguridad.